Partido importante en el que desde el primer minuto el Sant Marçal, trazó una línea imaginaria en campo propio y procuraron que de ahí no pasase el rival.
El Sporting Sant Marçal demostró en todo momento su superioridad ante un rival que nada pudo hacer para detener la avalancha de juego y ocasiones del equipo local.
Bastaron dos tiempos para que el Sant Marçal pusiera tierra de por medio en un partido que solo tuvo un color.
Valeije; estuvo en todas, en los goles, (2) y en las acciones de peligro de su equipo. Clarividente en el pase, certero en el remate. Estuvo fabuloso, exquisito en cada toque, como casi siempre.
Desde la llegada de Prats y con la intuición de Adri se aprovechan mejor los espacios al contragolpe, cosa que hemos comprobado en los últimos encuentros.
El “descanso” de Baquero nos robó el centro del campo durante dos tiempos y pasa lo que pasa que, un equipo es como un buen reloj: si se pierde una pieza todavía es bonito, pero ya no funciona igual. Aun así debe mejorar el sistema de marcaje que ejerce la defensa, pues deja muchas posibilidades de gol en el famosísimo pase de la muerte, muy temido por todos.
Bueno ya nos queda menos y vamos para arriba, la próxima semana el Son Oliva.
¡Animo y a por ellos!
Esos polvos, trajeron estos lodos...
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Hace 13 años
qe asco de eqipo
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